Una misionera, que estaba de novia, anunció su matrimonio a la iglesia por medio de una carta. En ella se sinceraba de su nerviosismo por aquella decisión, y las hermanas resolvieron enviarle un telegrama con un versículo en 1 JUAN 4:18, que aseguraba que "el perfecto amor echaba fuera el temor".
Todo iba bien, hasta que llegaron a la oficina de telégrafos y el empleado escribió el mensaje omitiendo el número 1, antepuesto al nombre de Juan (para indicar que se trataba de la primera epístola), y el mensaje llegó como JUAN 4:18: (“…porque cinco maridos has tenido, y el que ahora tienes no es tu marido; esto has dicho con verdad.”)
buenísimo :)
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